Moody’s califica como “estable” el sistema bancario panameño, pero advierte debilidad en la cartera hipotecaria

La calificadora de riesgo Moody’s Ratings (Moody’s) emitió un reporte en el que evaluó la perspectiva del sistema bancario de Panamá (Baa3 negativa) como “estable” para los próximos 12 a 18 meses, lo que ofrecerá oportunidades de negocios, pero advirtiendo que se observa debilidad en la cartera hipotecaria

De acuerdo con el documento, la actividad bancaria probablemente aumentará a medida que el crecimiento económico persista durante 2025, los sectores de la construcción y el turismo sigan recuperándose y el gobierno demuestre su capacidad para abordar ciertos asuntos críticos.

La actividad bancaria crecerá más de 8%

El crecimiento económico de Panamá se mantendrá sólido, con un aumento del producto interno bruto (PIB) real del 4.5% en 2025, frente al 2.9% registrado en 2024, impulsado por los sectores de la construcción y el turismo, que prometen mayores volúmenes de negocios y una mayor demanda de préstamos para los bancos.

Para Moody’s, es probable que el crecimiento de la cartera supere el 8% registrado en 2024, con un mayor potencial de crecimiento del crédito local, tras haber sido lento en los últimos dos años. Además, los fundamentos macroeconómicos estables del país -incluyendo tasas de desempleo e inflación estables, junto con una flexibilización gradual de las tasas de interés locales e internacionales- también respaldarán la demanda de préstamos.

Sin embargo, el panorama económico de Panamá enfrenta riesgos potenciales derivados de una posición fiscal debilitada, a pesar de los esfuerzos del gobierno para abordar estos problemas.

Además, los litigios en torno a la mina Cobre Panamá y las persistentes tensiones con Estados Unidos (EE.UU.) por el Canal de Panamá añaden incertidumbre al panorama económico del país.

La rentabilidad bajará desde niveles elevados

Por otra parte, Moody’s advirtió que la calidad de la cartera de crédito seguirá siendo más débil, ya que la morosidad en las hipotecas residenciales y de los inmuebles comerciales seguirá siendo alta en 2025, aunque los niveles adecuados de capital y las políticas conservadoras de suscripción de los bancos los ayudarán a protegerse contra riesgos inesperados que podrían surgir de las tensiones geopolíticas.

Además, considera que es probable que las utilidades de los bancos panameños disminuyan ligeramente desde los máximos actuales, pero se mantendrán sólidas. Las utilidades netas se mantuvieron prácticamente estables en 2024, situándose en 1.8% de los activos tangibles. Si bien las tasas de interés ahora están cayendo, las tasas de los nuevos préstamos son más altas que las de los préstamos anteriores, lo que respalda los ingresos netos por intereses y contrarresta los mayores costos de financiamiento.

Las provisiones para pérdidas crediticias, que respaldaron el aumento de las utilidades en 2024, probablemente suban desde su mínimo actual de 10 años. Sin embargo, los mayores volúmenes de préstamos y el crecimiento de los ingresos por comisiones compensarán la disminución de la rentabilidad general. El aumento de los costos de los bancos medianos en Panamá, que probablemente continúe en 2025, puede incrementar la presión para expandir sus operaciones y presentar oportunidades de consolidación en el sistema bancario.

Pero el reporte también advierte que algunos bancos pequeños seguirán teniendo dificultades en un mercado altamente competitivo, lo que sugiere posibles oportunidades de consolidación en 2025 en adelante.

La capacidad del gobierno para brindar apoyo podría disminuir

Finalmente, el documento de Moody’s señala que la capacidad del gobierno para brindar apoyo al sector bancario se está deteriorando a la par del debilitamiento de su equilibrio fiscal.

“Las restricciones fiscales afectarán la capacidad del gobierno de apoyar el sistema bancario. Sin embargo, suponemos que habrá pleno apoyo de las entidades estatales Banco Nacional de Panamá (Baa3/Baa3 negativa, baa3) y Caja de Ahorros S.A. (Baa3 negativa, ba2), en caso de ser necesario, dado que sus obligaciones cuentan con garantía explícita. Nuestras calificaciones de los bancos privados no consideran un aumento derivado del apoyo del gobierno”, enfatizó.