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Ari Taen Jadenkä, contar para frenar rezagos en la educación
Contar a partir de las formas, las figuras, con objetos del entorno y en la lengua materna, Ari Taen Jadenkä (Ha-den-go) surge como una opción para revertir el rezago educativo en los pueblos indígenas.
El programa Ari Taen Jadenkä, matemática divertida para la educación inicial en los pueblos indígenas, nació de la experiencia de Paraguay con el programa “Tikichuela”, y fue adoptado por el Ministerio de Educación con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), explica Griselda Atencio de la dirección de educación bilingüe intercultural del Ministerio de Educación.
El programa fue adoptado, inicialmente, para la comarca Ngöbe Buglé debido a la gran cantidad estudiantes y la necesidad de conservar la lengua materna en esta población.
Atencio explica que la comarca Ngöbe Buglé cuenta con 16 clasificadores para contar, y el programa aplica los cinco más básicos, utilizando objetos redondos como naranja, limón; cuentan las veces que realizan una acción y cuentan personas. Para los niños es fácil contar con objetos usuales en su entorno, porque es concreto y visible. El programa Ari Taen Jadenkä también se puede aplicar a las operaciones básicas de suma, resta, multiplicación y división, detalla.
El programa se aplica de forma paralela con el plan educativo nacional, y a través del método lúdico.
La metodología es audioactivos, además de contar con las formas, se brindan los recursos de audio y video, agrega Enrique Gardel, director de educación bilingüe intercultural.
Desde el 2018 se atienden cerca de 150 centros educativos, se ha dado capacitaciones a docentes de preescolar, y en febrero de este año, se reforzó la capacitación de docentes desde inicial hasta niveles de tercer grado con el tema: aprendamos matemáticas Ngöbe, con una participación de más de 89 docentes de tres regiones.
En la comarca Ngöbe Buglé, el programa de Ari Taen Jadenkä impacta a una población de 8,500 estudiantes, indicó Gardel.
Ari Tae Jandekä ha tenido efectividad y se espera que para el 2023 se amplíe a niveles de primer, segundo y tercer grado. El programa se implementó hace cuatro años, por lo que los niños que iniciaron en el mismo, ya alcanzan el nivel primario, detalló Gardel.
Hasta el momento, el programa está adaptado para la comarca Ngöbe Buglé y se espera, próximamente, extenderlo al resto de las comarcas.
La educación bilingüe intercultural es una deuda pendiente con los pueblos indígenas y el país.
La experiencia para todas las comarcas de tener una educación contextualizada a su realidad ha sido casi nula, sin embargo, en los últimos años se logró algunos avances, afirma el docente Enrique Gardel. La parte cultura y el idioma no son una barrera, es falta de material contextualizado, aclara.
“Son más de 20 años que se ha estado trabajando y, finalmente, se está concluyendo esta labor, y se espera para el 2023 contar con escuelas pilotos para la implementación de la educación intercultural bilingüe en las comarcas de Panamá”, adelantó Gardel.
El Meduca ya cuenta con programas escolares adaptados a la realidad de cada pueblo indígena sin salir de los programas nacionales, en algunas comarcas están en el proceso de revisión y de validación.
Gardel sostiene que para el proyecto es fundamental la capacitación de los docentes que trabajan en el área, para que conozca los instrumentos y el material que se le va a entregar.
Es un proyecto integral para que otras provincias también conozcan la cultura y el idioma de las comarcas indígenas, afirma el docente.
¿Cuáles son los beneficio de una educación bilingüe intercultural para Panamá? Siendo Panamá un país pluricultural y multingüe, el beneficio directo, son estudiantes profesionales en todo los campos, pero también conocedores de su propia historia, la historia nacional y universal, explica Gardel.
Hasta el momento, los niños en las comarcas se educan en el idioma español, cuando de sus casas llegan a los planteles hablando su lengua materna, cuestiona el docente. “La educación intercultural les va a fortalecer su idioma, y les facilitará aprender nuevos idiomas”, agrega.
Igualmente, se brinda al país personal capacitado y preparado para atender a los turistas. “Panamá podría decir con orgullo que es un país multicultural, para que las comarca sean más que playa, y también se reconozca la parte cultural y espiritual”, explica.
Recientemente, la Asamblea Nacional aprobó en tercer debate un proyecto de Ley que impulsa la incorporación del turismo rural a la industria turística, que explora las riquezas naturales, la medicina y su cultura en general, sin exponerlas.
Se establecen e implementan estrategias y políticas en materia económica, social y ambiental, que guiarán el desarrollo turístico en los pueblos indígenas basado en el Plan Maestro de Turismo Sostenible.
Pueblos indígenas
Recientemente, Panamá adoptó una ley que crea la Universidad Autónoma de los Pueblos Indígenas (UAPI), en la comarca Ngäbe Buglé, cuyo objetivo es fortalecer el sistema educativo a nivel superior en las comunidades indígenas.La sede de la UAPI estará ubicada en Llano Tugrí.