El primer ministro de Francia Jean Castex anunció el jueves que millones de automovilistas de ingresos bajos y medios recibirían cada uno 100 euros (116 dólares) como ayuda financiera para hacer frente al alza de los precios de la gasolina.

Castex dijo en la televisora TF1 que era una “respuesta excepcional a una situación excepcional”.

La medida abarcará a unas 36 millones de personas que ganan menos de 2.000 euros (2.325 dólares) al mes, incluidos empleados, trabajadores independientes, solicitantes de empleo y jubilados, señaló Castex. La ayuda empezaría a entregarse en diciembre y sólo se haría una vez.

La medida se produce en momentos en los que crece el descontento entre la población por una crisis energética global, que surge justo cuando muchos hogares tienen problemas para recuperarse de la crisis económica provocada por la pandemia de coronavirus.

El mes pasado, el gobierno francés entregó un subsidio en efectivo de 100 euros a unas 6 millones de familias de bajos recursos, para ayudarles a pagar sus recibos de luz.

Castex, que había anunciado anteriormente la decisión del gobierno de congelar los precios del gas natural, dijo que la medida duraría hasta finales del próximo año.

El asunto es particularmente delicado en Francia luego del movimiento de los “chalecos amarillos” que comenzó en 2018 contra un aumento en los precios de la gasolina, y que recibió ese nombre por los chalecos de color fluorescente que los automovilistas franceses deben tener en sus vehículos. El movimiento se tornó rápidamente en una protesta general contra la injusticia económica y condujo a manifestaciones semanales, que en ocasiones se tornaron violentas.

La medida del gobierno también se produce antes de las elecciones presidenciales de la nación programadas para abril, donde se tiene previsto que el presidente Emmanuel Macron busque reelegirse.

FUENTE: Associated Press