Una fuerte crisis interna sacude al Cuerpo de Bomberos de la provincia de Colón. 
Tropas y oficiales amenazaron este domingo con un paro de brazos caídos, luego de que surgieran diferencias con dos altos mandos que podrían asumir la comandancia tras la eventual jubilación del primer comandante Carlos Barker.
La tensión fue tal que se había convocado una conferencia de prensa para denunciar supuestas irregularidades en las filas colonenses.
Ante este panorama, el comandante jefe de los Bomberos de Panamá, Víctor Álvarez, se trasladó con urgencia a la sede bomberil en la Costa Atlántica.
Polémica y divisionismo
Al llegar, Álvarez a las instalaciones del Cuerpo de Bomberos en la provincia de Colón, enfrentó un ambiente de descontento.
Oficiales y tropas denunciaban que los dos altos mandos en cuestión no contaban con el respaldo necesario para asumir el liderazgo del cuerpo bomberil en Colón.
Sin embargo, el comandante ordenó suspender la conferencia de prensa, argumentando que ni él ni el comandante Barker habían recibido una denuncia formal sobre las supuestas irregularidades.
“Existe un principio de presunción de inocencia que debemos respetar”, advirtió Álvarez, dejando claro que cualquier queja debía formalizarse por los canales correspondientes.
Para calmar los ánimos, se reunió en privado con los oficiales, escuchó sus preocupaciones y confirmó que se abriría una investigación interna. 
Se conoció que los dos altos mandos señalados han sido citados este lunes a la sede central, donde se les iniciará un proceso.