Surgen nuevas anomalías en el uso del subsidio de CD

La diputada Ana Giselle Rosas puso a vivir a su cuadro político Edel Guerra: Le dio un contrato en su planilla de la Asamblea Nacional por $3,500.00 y logró que el presidente de Cambio Democrático (CD), Rómulo Roux, lo beneficiara con contratos por más de $42,500 de capacitaciones, que le fueron pagadas en el año 2020 con el subsidio electoral asignado a ese partido.
Ana Giselle Rosas también es presidenta de la Secretaría de la Mujer de Cambio Democrático. Y fue justo a las integrantes de la Secretaría de la Mujer de CD a quien Edel Guerra les dio las supuestas charlas por las que facturó $37,500.00 del subsidio electoral de ese colectivo. Los otros $5,000.00 los facturó por unas charlas sobre democracia interna de CD.
Todo este dinero se pagó en el año 2020, durante el periodo más duro de la pandemia de covid-19.
Este funcionario de la Asamblea Nacional es el dueño de la empresa Guerra & Consultores, de acuerdo a la información de su aviso de operación, cuyas oficinas están en la casa L-3, de la calle principal de El Ingenio, en Betania, y se dedica a la capacitación en “recursos humanos”.
Asimismo, una empresa denominada Panamá Active Training, vinculada con Edel Guerra, también ha sido favorecida por más de $42 mil para desarrollar otras actividades de capacitación. Guerra aparece como facilitador de esta empresa, según la propia información que la compañía publica en sus redes.
Dirigentes de CD han hecho denuncias sobre malversación de los fondos del subsidio electoral asignados a Cambio Democrático, durante la administración de Rómulo Roux, por parte de la actual administración de este colectivo.
Los cuestionamientos se han evidenciado públicamente y van desde sobreprecios de 700% en compras de mascarillas, la contratación de familiares de los directivos de CD y contratos de alquiler de oficinas del colectivo en inmuebles propiedad de dirigentes allegados al presidente del partido.